Buenas,
Solo por dejar mi opinión, entré a usar Prestashop en pleno cambio a 1.7 y funciono bien con él. Soy programador con mis fortalezas y mis limitaciones, que no son pocas. Sea como sea, pienso que cualquier desarrollador serio debería saber (o aprender) que las actualizaciones hay que tomárselas con cautela, así como el uso de complementos de terceros (plantillas, módulos, TPVs...). Como ya se ha dicho por aquí, lo que funciona ya sabemos que funciona, y puede que no se dijera de forma clara, pero yo entendí que un Prestashop 1.7 y un 1.6 son plataformas distintas. Ni si quiera ofrecen las mismas funciones.
Hay que ser conscientes de que, sobretodo en el mundo de la programación, se acostumbra a correr demasiado y hacia demasiadas direcciones. La función de un desarrollador también debería ser la de filtrar o poner en espera los cambios que el cliente necesita (si los necesita) para que a éste no le lleguen dolores de cabeza innecesarios. A veces tengo la impresión de que salen a superfície las consecuencias de la cultura del click rápido y la falta de lectura sosegada que hace años estamos viviendo.
La otra cuestión es el bombardeo que nos lanzan estas plataformas (Prestashop, Wordpress...) para ganar adeptos con la máxima de que "cualquiera puede montar una web o una tienda online". Bombardeo del que mucho usuario 1.0 acaba siendo víctima. Otra vez, el papel del desarrollador es explicarle al cliente qué es propaganda y qué no. Servicios que no requieren conocimientos los hay, pero tendrán sus limitaciones, precios y tiempos invertidos. Cuando todo eso se obvia es cuando nace la figura del Builder independiente, que como ayuda puede ser muy útil pero como único profesional al mando de un proyecto se convierte en un simple intermediario entre la plataforma y un cliente poco familiarizado con la tecnología, quedando el proyecto vulnerable a todos los inconvenientes de esa plataforma.
He explorado otras alternativas e-commerce. Algunas son muy interesantes, pero PrestaShop me sigue pareciendo una buena opción para seguir recomendando. Y, por cierto, también creo que deberían ser las empresas las que se adapten a las necesidades de los clientes, y no a la inversa.
¡Saludos y gracias por vuestro tiempo!